Las guías de RCP 2010 han puesto a la vía aérea en un lugar menos protagónico que el apoyo circulatorio con las compresiones torácicas. Presentamos un resumen sobre las recomendaciones de manejo de la vía aérea durante la RCP según las guías 2010.
Sobre el manejo básico de la vía aérea, las recomendaciones son:
– Utilizar cánula orofaríngea y nasofaríngea cuando se realiza ventilación con bolsa-máscara, porque permite entregar volúmenes corrientes más adecuados que una ventilación sin utilizarlos. Cuando existe o se sospecha una lesión de base de cráneo, no se debe utilizar la cánula nasofaríngea.
– No utilizar presión cricoidea para prevenir aspiración (como se recomendaba el 2005), porque empeora la ventilación, aumenta la presión inspiratoria máxima, obstruye la vía aérea, complica la instalación y ventilación por dispositivos supraglóticos, además de empeorar la visión laringoscópica.
Sobre el manejo avanzado de la vía aérea (tubo endotraqueal o dispositivos supraglótico), las recomendaciones son:
– La intubación orotraqueal sin el adecuado entrenamiento tiene una alta incidencia de falla y complicaciones, además de interrumpir las compresiones.
– No es posible recomendar un momento ideal para instalar la vía aérea avanzada. Los estudios tienen resultados contradictorios.
– La instalación debe hacerse sin detener las compresiones. Si no es posible, minimice la interrupción de las compresiones.
– Los dispositivos supraglóticos son una opción válida. Son mejores que la ventilación con bolsa-máscara (menos regurgitación, mejor ventilación, menos insuflación gástrica y menos interrupción de compresiones). Son iguales o mejores que la intubación orotraqueal (igual o mejor sobrevida, mayor tasa de éxito, más rápidez y menos tiempo sin compresiones).
– La Confirmación de la posición del dispositivo debe hacerse con monitoreo continuo de la onda de capnografía (100% de sensibilidad y especificidad). Los otros dispositivos (detectores colorimétricos de dióxido de carbono, detectores esofágicos de jeringa, detectores esofágicos autoinflables y capnómetros sin onda) han mostrado que son de poca utilidad en pacientes en PCR.
Comentarios
– Quizás el mayor cambio con respecto a las recomendaciones del 2005 es que los dispositivos supraglóticos (máscara laríngea y tubo laríngeo) se han impuesto como la mejor opción para el manejo de la vía aérea. Han mostrado iguales o mejores resultados que la ventilación con bolsa-máscara y la intubación orotraqueal, además de ser más fáciles y rápidos de instalar.
– La intubación orotraqueal debería quedar reservada sólo para médicos especialistas entrenados y con experiencia permanente en el procedimiento. Actualmente no hay razón para permitir que personal menos entrenado realice esta maniobra, porque existe una opción más fácil, con menos complicaciones y que se asocia a iguales (o mejores) resultados, como los dispositivos supraglóticos.
Bibliografía
Recomendaciones 2010 del Comité Internacional de Reanimación
Guías de reanimación 2010 de la Asociación Americana del Corazón: básicas y avanzadas.
Guías de reanimación 2010 de la Consejo Europeo de Reanimación